martes, 27 de marzo de 2012

¿Gato o tulipán?

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Comienzan a aparecer sobre los limoneros las flores de azahar, el viento lleva y trae ese olor entre cítrico y dulzón que tanto me gusta. ¿Saben lo que eso significa? Las vacaciones de Semana Santa se aproximan, lo cual me tiene bastante contenta por la promesa de una bella (y conocida) playa mexicana al lado de mis amigos, un viaje por carretera, cambios de paisaje y de personas (tan necesarios para mí es estos momentos).

Creo que me siento un poco... ¿Triste? ¿Es esa la palabra que busco? Supongo que no siempre tomo las mejores decisiones, que no digo las palabras adecuadas, y, en general hago las cosas un poco más incómodas. En realidad no es mi intención, ésta vez intento hacer lo correcto, y no es fácil. A veces me pregunto: ¿Hasta cuándo entenderé?

Como la pintura es una de las pocas cosas que hacen que me olvide de todo, bueno, intento practicarla. Llevo unas clases-taller en las que pintamos a base de pinturas acrílicas y de óleo (aunque en realidad yo sigo prefiriendo los pasteles). La clase anterior estaba tranquila con todos los materiales listos y disponibles para su uso, en lo que pensaba qué pintar. Un rato después (después de bobear y tener casi nulas ideas, o unas muy poco buenas para plasmarlas) fui a donde se encontraba la maestra para ver que tal le parecía mi propuesta: quería pintar un gato.

Por la expresión de su cara me dí cuenta inmediatamente que esa no le parecía una buena idea (la vi técnicamente revolverse sobre su escritorio como si el estómago se le saliera por la boca) sino que todo lo contrario; traté de defender mi argumento, porque no creo que un pez o una flor sea un mejor tema que un gato; además, el mío sería uno azul. 

Está de sobra decir que mi gato azul no estaba destinado a aquel lienzo, y como no me quedaban más opciones que peces (aburridos y feos) o flores, opté por elegir mi flor favorita: un tulipán. Los tulipanes me parecen sencillos pero elegantes,  hermosos pero discretos, además (y quizás lo más importante) me parecen más fáciles de pintar que otras flores. Ya casi termino la composición, tengo que buscar más ideas en las que no haya gatos involucrados...


♫ El gato que está triste y azul 
no va a volver a casa nunca más 
Roberto Carlos.

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